Podemos decir que cada llamada recibida por un restaurante es para hacer una reserva. Es el motivo más habitual. Habrá un porcentaje de llamadas que no lo sea, pero serán las menos. Digamos que el 80% de las llamadas son para hacer una reserva. A través de esta métrica podemos saber cuándo nos llaman y cuántas veces lo hacen.
Nos indica el día de la semana y el número de llamadas recibidas. Podemos filtrar por horas o por día de la semana y por periodos de tiempo de una semana, un mes o un trimestre.
Medir para saber
Si llevamos un buen control de las métricas podemos verlo por semanas para ir comparando con nuestros eventos, publicidad, acciones en redes sociales… Es una forma de medir las ventas producidas por determinadas acciones así como aprender cómo se comportan mis clientes.
Clientes maduros o volátiles
Un ejemplo: los martes llaman más que los lunes y los miércoles. Suelen llamar entre las 12 y las 2 de la tarde y vuelven a llamar a las 8 de la tarde. Con este dato podemos ver qué ofrecemos los martes para que sea el día que más reservas recibo. Si puedo ver para que fecha reservan. Si llaman el martes para reservar para el viernes tengo un público previsor, más maduro, toma decisiones con tiempo. Si son para el mismo día, será un público más volátil, decisiones más rápidas. Puedo adaptar mi oferta el tipo de público.